Miles de soldados y policías están desplegados este domingo en Bangkok, la capital tailandesa, para abortar cualquier intento de manifestación contra el golpe de Estado del pasado 22 de mayo. El signo escogido por los manifestantes para expresar su apoyo a la democracia es el mismo de Los Juegos del Hambre: los tres dedos medios de la mano izquierda levantados.
“Es un signo contra el golpe. Queremos democracia. No queremos que los militares tengan el poder”, dice un hombre.
Militares y agentes han desalojado un popular centro comercial donde se había iniciado una protesta pacífica. Las reuniones de más de cinco personas están prohibidas, así que los manifestantes se reúnen en pequeños grupos de cuatro como forma de denuncia.
El Jefe del Ejército tailandés anunció el pasado viernes un plan en tres fases para restablecer la democracia: reconciliación, reforma del sistema político y, por último, elecciones, en una periodo que se anuncia muy largo.