Google da el primer paso para que los internautas europeos puedan ejercer su derecho al olvido.
El megabuscador de Internet ha anunciado la puesta en marcha de un formulario online para solicitar la supresión de resultados de búsquedas que se consideren obsoletas y perjudiciales.
Para ello los usuarios deberán acreditar su identidad, así como los enlaces con la información que quieran eliminar.
“Creo que esto no va lo suficientemente lejos”, se queja el portavoz del Partido Pirata belga. “Por un lado, el usuario de internet puede sentirse engañado porque Google le pide el DNI para validar la solicitud, lo que contradice el derecho a la privacidad. Por otro, el internauta tendrá que repetir este procedimiento con otras webs y motores de búsqueda. Google insiste en que no serán ellos quienes decidan sobre las peticiones, sino los cuerpos reguladores nacionales”.
La empresa estadounidense, que procesa más del noventa por ciento de todas las búsquedas en Internet del continente, cumple así con la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea del pasado trece de mayo, a instancias de la denuncia de un ciudadano español.
La próxima semana se reunirán las agencias de protección de datos de los 28 para estudiar el alcance de la medida.