En Egipto, las elecciones presidenciales se prolongan un día más para fomentar la participación. En estas elecciones presidenciales se espera que gane el general Al Sisi.
Los egipcios tienen que elegir presidente entre el exjefe del ejército, Abdelfatah al-Sisi y el militante izquierdista Hamdin Sabahi.
La única incertidumbre hoy es la participación, para incrementarla se ha declarado dia festivo.
Al Sisi se hizo popular por su implacable represión de los islamistas, representa el poder autoritario y para muchos la estabilidad.
“He votado por al Sisi ante todo por la estabilidad y la seguridad, asegura este egipcio a pie de urna. El presentó su programa en detalle y en mi opinión tiene buenas ideas, independientemente de las circunstancias.”
“Espero que al Sisi cree puestos de trabajo para nuestros jóvenes, porque muchos terminan sus estudios y no encuentran un empleo, comenta este otro votante. Queremos que les dé la oportunidad de trabajar, e iniciar proyectos, porque, sinceramente, la gente está harta, después de que Mursi y Mubarak acabaran con el país “.
Egipto atraviesa una grave crisis desde 2011. Han aumentado la inflación y el desempleo sobre todo entre los jóvenes, los grandes ausentes de estos comicios, pues muchos de sus líderes han sido enjuiciados o encarcelados.
También la oposición islamista, que sufre una fuerte represión, ha desaparecido del mapa político.