Los separatistas prorrusos multiplican sus acciones para evitar la celebración de los comicios del domingo. Un grupo de rebeldes armados ha requisado en las últimas horas el material electoral de una de las sedes de la comisión de Donetsk. Los insurgentes de las regiones de Donetsk y Lugansk bloquean el trabajo de más de la mitad de las comisiones electorales; lo que pone en duda la celebración de la votación en numerosas circunscripciones.
La violencia sobre el terreno también hace peligrar los comicios. Este viernes han perdido la vida siete combatientes en los enfrentamientos entre los insurgentes prorrusos y el ejército, en la región de Donetsk.
La nueva escalada del conflicto comenzó la madrugada del jueves. Las fuerzas gubernamentales sumaron 18 bajas, la mayor pérdida desde mediados de abril, cuando lanzaron la operación para acabar con la rebelión separatista.
Seis meses después de las revueltas del Maidán, Ucrania se encuentra al borde de la guerra civil y la división territorial.