No hay color en las elecciones presidenciales ucranianas. El europeísta y magnate chocolatero, Petro Poroshenko, encara el esprín final de los comicios con todas las encuestas a su favor y acercándose a ese 50% de los vostos más uno necesarios para evitar una segunda vuelta:

– “Estoy seguro de que estamos luchando por la paz, la seguridad, la recuperación económica , la ausencia de corrupción y una solidaridad internacional total con Ucrania, lo que nos permitirá no sólo acabar con el caos en el este, sino para recuperar Crimea pronto”, decía este jueves en un mitin ante miles de seguidores.

El miedo a que el proceso electoral se vea ensombrecido por un baño de sangre en el este del país está presente en el espíritu del mediador de la OSCE para Ucrania, el diplomático alemán Wolfgang Ischinger, quien ha afirmado en una rueda de prensa que espera no se utilice ninguna fuerza militar de aquí al final del proceso electoral para que este pueda seguir adelante. “Espero que este mensaje esté siendo escuchado no sólo del lado del Gobierno, sino también del otro lado”, ha dicho.

Las encuestas sitúan en segunda posición a la exprimera ministra Yulia Timoshenko. Con un 8% de los votos está muy lejos de Poroshenko y bastante cerca de alguno de los 19 candidatos restantes.