Son supuestas fotos de militares rusos en el este de Ucrania. Se trata de una serie de instantáneas filtradas a varios medios de comunicación, con las que las que autoridades ucranianas dan por probado el envío por parte del Kremlin de soldados a su territorio para ayudar a los separatistas prorrussos.

Para Estados Unidos es una prueba más de algo que ya se sabía, como reconoce Jen Psaki, portavoz del Departamento de Estado de EEUU: “Ya hemos comentado este tema antes de que estas fotos se hiciesen públicas. Ya comentamos que creíamos que había fuertes vínculos entre Rusia y las milicias armadas que hemos visto en el este de Ucrania, en Crimea y en otros lugares. Esto es simplemente una evidencia fotográfica de ello”.

Las instantáneas identifican a soldados en el este de Ucrania como los mismos que participaron en operaciones del ejército ruso en el pasado, por ejemplo, en la guerra con Georgia; y muestran cómo el armamento y equipo de los uniformados sin identificar en las regiones ucranianas rusófonas es el propio de un ejército regular como el ruso.

No obstante, el contenido de las fotos no ha podido ser verificado de forma independiente. Moscú no se ha pronunciado oficialmente sobre estas imágenes.