El anuncio de que el presidente Juan Manuel Santos creará en breve 328 mil empleos no ha devuelto el optimismo a los habitantes de Colombia. El desempleo hoy no se expresa sino en cantidades muy superiores a esa. Como suele suceder en los TLC o tratados de libre comercio, donde los tiburones devoran a las sardinas, la suscripción de esos documentos ha significado para la sociedad colombiana la concenmtración de la riqueza en cada vez menos manos, el empobrecimiento ininterrumpido de amplios sectores sociales y el desmantelamiento de su incipiente planta industrial. teleSUR