El movimiento de caderas de Shakira vuelve loco a medio mundo, y el último que no se ha podido resistir a su encanto ha sido Adam Levine, el vocalista del grupo Maroon Five. Parece que esto no le ha sentado muy bien a Gerard Piqué, ya que según el portal digital Gossip Cop podría estar celoso de la estecha relación que mantienen los dos cantantes.