El Primer ministro turco disfruta el triunfo y amenaza a sus rivales, no a los partidos de la oposición, sino al movimiento Hizmet de Fetullah Gullen, al que acusa de organizar un Estado paralelo y montar una campaña de desprestigio contra él “ Lo pagarán”, decía ayer.
Los resultados del AKP en las Municipales del domingo son impresionantes, tanto que la oposición denuncia que son demasiado buenos para ser verdad y habla de numerosos casos de fraude. El socialdemócrata Partido Republicano del Pueblo, segundo en el recuento, va a impugnar el escrutinio en Ankara y Estambul.
Bekir Agirdir es analista en el instituto turco Konda.
“ Estos resultados electorales no significan que la corrupción sea tolerada o ignorada. La corrupción tiene que ver con la ley y las urnas son política. Pero todo apunta a que tanto Erdogan como el AKP van a cometer el error de interpretar los resultados como si todas las acusaciones quedaran olvidadas”
Erdogan ha ganado pese a todo: las acusaciones de corrupción, el bloqueo de redes sociales y las denuncias de autoritarismo. Había planteado esta cita electoral como un plebiscito de sus 11 años en el poder y esta victoria relanza la posibilidad de que en agosto presente su candidatura presidencial. De aquí a entonces, habrá que esperar para ver si los turcos le han dado o no un cheque en blanco.