Hombre de consenso hasta después de la muerte. Adolfo Suárez consiguió recuperar la unidad política en España ayer una vez más. Zapatero, Aznar y González se unieron al homenaje en el Congreso de los Diputados, donde se instaló la capilla ardiente. El rey Don Juan Carlos también acudió a despedirse del amigo que fue Suárez para él. Salió del Congreso visiblemente afectado.

Después de los políticos, el acto se hizo público y comenzaron a desfilar miles y miles de personas para dar el último adiós al arquitecto de la Transición.

Adolfo Suárez será enterrado hoy en el Claustro de la Catedral de Ávila y su funeral de Estado se celebrará a finales de mes en La Almudena de Madrid. El Gobierno ha aprobado cambiar el nombre del aeropuerto de Madrid-Barajas, por el de Aeropuerto Adolfo Suárez.