Puntos cruciales del comercio establecido en Táchira permanecen semiparalizados por efecto de las barricadas o guarimbas que bajo la sombra de la noche han seguido colocando los vándalos y -en palabras de un lugareño- los agentes de la desestabilización. Este fin de semana los dueños de esos establecimientos, o los encargados, hicieron llegar su queja a la autoridad. teleSUR