Las lluvias torrenciales en Bolivia han dejado más de 52 mil familias afectadas, 46 muertos y 14 desaparecidos; 109 municipios inundados, y se han perdido miles de hectáreas de sembradíos. Los desbordamientos de los ríos en el departamento del Beni provocan una de las mayores emergencias en la historia reciente del país suramericano. El gobierno del presidente Evo Morales ha implementado un plan de emergencia para apoyar a los damnificados. teleSUR