Es el asesinato que ha conmocionado a Brasil. El del cineasta, Eduardo Coutinho, que apareció acuchillado el domingo en su residencia del exclusivo barrio de Lagoa de Rio de Janeiro. El mundo de la cultura le ha rendido homenaje en el funeral que se ha celebrado en el cementerio de São João Batista, en Botafogo. Coutinho creó un nuevo lenguaje para los documentales que producía.
“ Ha sido un enorme shock. Nadie sabe todo lo que ocurre dentro de una familia, la convivencia, los problemas que surgen”, decía su hermana.
El principal sospechoso es el propio hijo de Coutinho, Daniel de 41 años y esquizofrénico. Cuando la policía llegó al domicilio familiar encontró el cadáver, a la esposa de Coutinho con 5 puñaladas y al hijo igualmente herido.
Rivaldo Barbosa, director de la División de Homicidios:
“ Daniel Coutinho cometió estas atrocidades y después llamó a la puerta de los vecinos. Estaba delirando, totalmente incongruente, no encadenaba las ideas y dijo lo siguiente: he liberado a mi padre, intenté también liberar a mi madre y a mí mismo, pero no lo conseguí”
El director de la División de Homicidios, Rivaldo Barbosa, ha informado de que Daniel Coutinho está en el hospital y que, al dársele el alta, será trasladado a la cárcel.