Ikea anuncia unos beneficios récord en 2013, que indican una recuperación del consumo en gran parte de sus mercados. El sueco y número uno mundial de los almacenes de muebles ganó en su año fiscal terminado en agosto pasado 3.300 millones de euros, un tres por ciento más que un año antes. Donde observó una mayor progresión fue en China, Rusia y Estados Unidos.
Pero en su mercado tradicional europeo, en el que realiza el setenta por ciento de su cifra de negocios, también vio signos positivos. Excepto en España e Italia, donde las ventas bajaron. En su nuevo ejercicio, Ikea piensa seguir invirtiendo en mercados emergentes como China e India y desarrollar más las ventas por internet.