Asciende a 21 el número de muertos por el ataque de varios terroristas – uno de ellos suicida – en un restaurante libanés del centro de Kabul. Al menos 13 de ellos son extranjeros, entre los que se encuentran el máximo responsable del FMI en el país, el libanés Wabel Abdalá, y tres funcionarios de la ONU.
El distrito donde se sitúa el establecimiento es sede también de numerosas embajadas y legaciones internacionales.
“Cuando estaba en la cocina escuché una explosión”, decía uno de los cocineros, “escapé y me dirigí al tejado, me oculté allí durante dos o tres horas.” Otro de ellos añadía: “Tras la explosión todo se llenó de polvo. Fui al tejado y salté hacia una casa vecina para alcanzar la calle y correr. Uno de los atacantes se inmoló y otros dos estaban disparando a gente dentro.”
La policía asegura que abatió a estos dos atacantes. Un grupo talibán ha reivindicado los ataques, que tuvieron lugar a las siete y media de la tarde hora local.
Este 2014 finalizará el despliegue de tropas de la OTAN en el país con una retirada gradual de efectivos que culminará en diciembre.