El Tribunal Especial para el Líbano ha abierto el proceso judicial contra los cuatro miembros de la milicia chií Hizbulá acusados de asesinar al ex primer ministro libanés Rafic Hariri en Beirut en febrero de 2005.
Los acusados se encuentran en paradero desconocido por lo que el juez ha decido empezar la vista como si estos estuvieran presentes y hubieran declarado su inocencia.
El atentado, que hizo tambalear los frágiles cimientos del país, ocurrió frente a un hotel situado junto al paseo marítimo de la capital libanesa. Un camión bomba con más de 2 toneladas de TNT explotó al paso del vehículo de Hariri. La explosión mató en total a 22 personas.
El atentado provocó que Siria, acusada de haber ordenado el magnicidio, tuviera que retirar sus tropas del Líbano tras 30 años de presencia en el país.