La Unión Europea ha hecho un llamamiento a las autoridades turcas para que investiguen de manera imparcial las alegaciones de corrupción que pesan sobre varios hombres de negocios, hijos de ministros, asesores ministeriales y otros cargos públicos.

El llamamiento de Bruselas se produce mientras las detenciones continuaban este jueves en Estambul. Decenas personas han sido detenidas en los últimos días.

Cinco altos responsables de la policía han sido destituídos. Este jueves ha sido el turno del jefe de la policía de Estambul.

“Soy un oficial del Estado. Los oficiales del Estado pueden ser nombrados pero también destituídos. He intentado servir a mi país y a la gente de mi país durante cuatro años y medio”, explicó Huseyn Capkin tras conocer la noticia.

El primer ministro turco, Reccep Tayyip Erdogan, ha asegurado que se trata de “un asunto muy sucio en el que ve intereses internacionales contra su país”.

La prensa turca asegura por su parte que tras estas detenciones podría existir una batalla soterrada entre el gubernamental AKP y el poderoso movimiento religioso del predicador Fethullah Gülen que posee grandes conexiones tanto en la policía como en el aparato judicial.