Seúl responde así a un anuncio similar de China, hace dos semanas, que disparó la tensión en Asia nororiental. La zona de defensa determina el despliegue de las Fuerzas Aéreas si aviones extranjeros entran sin notificarlo.
El portavoz del ministerio surcoreano de Defensa ha explicado que “el ajuste de la zona de defensa de identificación aérea es acorde a las normas de aviación y a las leyes internacionales”.
Seúl amplía su espacio de defensa en dirección sur. Incluye el islote controlado por Seúl pero reivindicado por China, y que fue introducido por Pekín en su nuevo mapa. El perímetro chino abarca además las islas Senkaku/Diaoyu, administradas por Japón y que reclama también Pekín; lo que ha enfurecido a Tokio.
Estados Unidos, principal aliado militar de Corea del Sur y Japón, no reconoce la zona china y ha abogado por el uso de los canales diplomáticos para desactivar la tensión en el mar de China Oriental.
La nuevo perímetro surcoreano se hará efectivo el 15 de diciembre.