Barcelona, 17 sep (EFE).- El técnico del Barcelona, Gerardo 'Tata' Martino, ha confesado sus "grandes expectativas" ante el debut mañana como entrenador en Liga de Campeones ante el Ajax, un partido que le genera "una gran ilusión", pero también la "intranquilidad de estar a la altura de las circunstancias".

"Está claro que, para todo entrenador, tener la posibilidad de participar en una competición como la 'Champions' es un hecho relevante en su carrera. Me genera una gran ilusión, tengo grandes expectativas y, como siempre que le toca a uno jugar con un grupo de jugadores de tantas trascendencia, la intranquilidad de estar a la altura de las circunstancias", ha reconocido.

En la rueda de prensa previa al choque en el Camp Nou, el preparador argentino ha recordado que cuando asumió el cargo dijo que "si no ganaba algún título, sería evidentemente un fracaso".

"Aterricé desde Argentina con esa idea y la sigo sosteniendo. Si estoy acá es porque creo que podemos repetir los mejores momentos del club en estos años", ha reiterado Martino, que ha considerado que a pesar de que la última eliminatoria del Barça ante el Bayern de Múnich "no tuvo el mejor resultado", perdió ante un equipo "equiparable" al Barcelona.

"Era un partido que se podía perder, quizá no de la forma como ocurrió", ha opinado el técnico, que no ha querido elegir entre ganar Liga o Champions: "No quiero categorizar, pero cada uno de los torneos que el Barça debe jugar, debe hacerlo para intentar ganar".

Preguntado acerca del debate sobre el cambio de estilo del equipo, ha afirmado que "el pedido a los jugadores es que hagan la mejor elección en el momento adecuado del partido, respecto a si se necesita ser más directo o sostener la tenencia de la pelota".

"Antes de pensar en rotar los jugadores -ha proseguido-, tenemos que hacer que el equipo sea mucho más sólido, sepa cerrar los partidos y todos corramos un poco menos. Primero hay que solucionar el funcionamiento del equipo".

Por ello, ha subrayado que su "obligación es la autocrítica permanente", pues comprende que se cuestione todo "en un equipo que ha tenido un nivel de excelencia y en el que siempre se recuerdan esos momentos para tratar de repetirlos. Tratamos de seguir siendo mejores y punteros, pero más solidos y sin tantos baches".

Así, ha justificado los goles encajados a balón parado por "un problema de envergadura, más que por el sistema de marcaje"; y por otro lado, ha considerado que el debut de Neymar en Liga de Campeones "será el primero de una larga lista en su carrera".

Sobre el Ajax, ha elogiado su "escuela de fútbol casi inalterable", aunque ha admitido que "en todos los clubes siempre hay épocas de camadas de jugadores que son difíciles de igualar", y ha calificado a Bojan Krkic, cedido por el Barça al equipo holandés, de delantero con "excelentes condiciones, muy desequilibrante y que está intentando encontrar su mejor lugar en el mundo".

El defensa Gerard Piqué ha asegurado hoy que el estilo del Barça es "innegociable" y que, si cambiara su manera de jugar, quizá muchos de los actuales jugadores no podrían estar en el equipo, aunque ha matizado que son necesarias "más variantes" porque el equipo se volvió "previsible".

Sus palabras en una entrevista acerca de que el conjunto catalán había sido "esclavo" de la posesión de balón en los últimos años había centrado el debate en la capital catalana esta semana, una polémica que el central ha querido zanjar con su claridad habitual.

"Creo que el titular lo cogieron de una entrevista que, si después la lees, se saca de contexto y a partir de ahí cada uno saca la opinión que quiere. Lo único que quise decir es que nos hemos convertido en muy previsibles", ha explicado Piqué en la rueda de prensa previa al estreno en Liga de Campeones ante el Ajax.

El defensa, que ha recordado que lleva desde niño jugando en el club, ha negado que criticara el estilo de juego, que es "innegociable": "Es más, hay muchos jugadores que, si cambiáramos la manera de jugar, quizá no brillaríamos tanto y no estaríamos aquí".

"Pero sí que es verdad que en los últimos dos o tres años los equipos saben como jugamos y a veces se convierte como un partido de balonmano. Eso nos hace muy previsibles, nos roban la pelota y nos crean peligro en contragolpes. Lo único que dije es que teníamos que conseguir tener más variantes", ha reiterado.

Porque, a su juicio, "en las jugadas rápidas los goles valen igual, a veces parecen que queramos entrar hasta la cocina", ha añadido Piqué, que no se ha mostrado preocupado por ser cuestionado habitualmente tanto en el campo como por sus declaraciones.

"Soy como soy y los que me quieren, me quieren, y los que no me quieran no me voy a preocupar mucho. A veces entiendo mucho a los jugadores que salen en rueda de prensa y tiran de tópico. Por eso yo saco el titular sensacionalista, para que muchos programas que son el 'Sálvame' del fútbol puedan hab