ENTREVISTA, A ANDRÉS ELOY MÉNDEZ (DIPUTADO DE LA ASAMBLEA NACIONAL)
JVR: El tema de la corrupción es complicado, primero porque hay mucho fariseísmo que la enmascara. ¿Tú opinión?

AEM: Decía el Presidente Maduro que la corrupción es un monstruo de 1000 cabezas. Además tiene un hilo histórico el cual tiene que ser roto mediante un golpe contundente.

JVR: ¿Cómo defines tu un golpe contundente?

AEM: Creo que Nicolás ha puesto en la mesa lo primero: la voluntad política de los actores clave, el jefe del estado, igualmente lo ha hecho el Presidente del Parlamento, Diosdado Cabello.

JVR: Eso es importante, pero perseverar en ese combate…

AEM: Hay que ser muy audaz en la lucha, para que sea audaz tiene que ser veraz, objetiva, concreta, como lo planteamos al país el día martes. No banalizando ni prostituyendo la denuncia, sino concretándolas en pruebas irrefutables para ir más allá del esfuerzo humano. Hay que hacer un esfuerzo que ensanche los horizontes de lucha contra la corrupción en lo legal y en lo institucional.
Bolívar decía que no solo pena a muerte a quien malverse fondos de haciendo pública para su uso, sino a los jueces e instituciones que no le den la pena de vida. Ahí es necesario lo institucional y lo legal.

JVR: Hay lo que pudiéramos llamar una especie de meta utópica de que se pueda erradicar la corrupción, yo quisiera que fuera así y tu seguramente que también, pero la experiencia a través de la historia demuestra que es muy difícil. Incluso en el campo del socialismo ha habido corrupción. La condición humana está como tocada por eso. ¿Es posible que surja el nuevo hombre para erradicar ese flagelo?

AEM: Más que eliminarla, erradicarla, es hacerla retroceder, es condenarla, es no hacerle apología a la corrupción. ¿Cómo podemos aceptar que se haga una marcha para defender a un corrupto? Eso es hacerle apología a la corrupción. Tenemos que ir a lo coercitivo, es necesario ir a lo coercitivo, porque creemos que en éste momento histórico debemos de echar a un lado las hipocresías, los amiguismos. Decíamos en el debate del día martes, que no es chantajeable, ni puede las instituciones fragilizarse frente al fenómeno de la corrupción por chantaje ni medio de comunicación alguno. Hay que ir al fondo sin doblegar, si esa corrupción tiene boina roja, pues más preso tiene que estar.